Caracas.- En este Día del Niño, fecha que debería ser de pura alegría ya celebración, mi corazón de madre, de mujer emprendedora y de dirigente de COPEI, me impulsa a alzar la voz por nuestros pequeños.
No podemos ignorar la realidad: la infancia venezolana enfrenta desafíos inmensos. Pero precisamente por ello, este Día del Niño debe ser un llamado a la acción, un compromiso ineludible con el país que estamos construyendo.
Desde cada hogar, cada escuela y cada rincón de nuestra amada Venezuela, observamos con preocupación cómo la deficiente educación, la falta de servicios básicos y la terrible situación en los hospitales afecta directamente en el bienestar de nuestros hijos. Sin embargo, en medio de las dificultades, surge la esperanza y la inquebrantable voluntad de millones de padres y madres que, como yo, luchamos incansablemente por un futuro mejor para los nuestros.
Como madre creo firmemente que la felicidad de un niño es el más claro indicador de una gestión local exitosa. Los niños tienen derechos inalienables: derecho a la alimentación, a la salud, a la educación, a la recreación, a un entorno seguro y protector. Y es en nuestros municipios donde estos derechos deben ser garantizados y defendidos con fervor.
No podemos esperar que un niño sea feliz si el agua no llega a su casa, si la luz se va a diario, si las medicinas son inalcanzables, o si la escuela carece de recursos.
La felicidad infantil no es un lujo, es el resultado de políticas públicas coherentes y de una inversión prioritaria en su desarrollo integral.
Nuestro partido entiende estas y muchas otras necesidades que como país estamos padeciendo, las ha tomado en consideración, y hoy, pone al servicio de todas y cada una de las candidaturas a las diferentes alcaldías y concejos municipales, un plan de políticas públicas que denominamos Agenda Venezuela Cambia Por La Venezuela Posible, para la concreción de una República de muchas posibilidades, como todos la soñamos y por la cual, cada día, labramos un peldaño desde nuestros talentos y capacidades.
Este Día del Niño no es para discursos huecos, es para reafirmar nuestro compromiso de trabajar sin descanso, desde cada alcaldía y concejo municipal para transformar la realidad de nuestra infancia.
¿Cuál es el país que queremos? Un hogar para cada niño venezolano. ¿Cuál es el país que anhelamos? Es aquel donde cada niño venezolano, sin excepción, pueda soñar sin límites, crecer en un ambiente de paz y tener garantizados todos sus derechos. Un país donde la política esté al servicio de la gente, donde la honestidad y la eficiencia sean los pilares de la gestión pública.
Sembremos en ellos la semilla de la esperanza, del trabajo y de la convicción de que sí podemos construir una Venezuela próspera y justa.
¡Por la niñez que merecemos luchemos juntos, y este 27 de julio Vota Verde, Abajo y a la Izquierda. VOTA COPEI. Por la defensa de la municipalidad.
Lic. Lorys Romero
Vicepresidenta Nacional de Copei